Qué es el punto de pedido

¿Sabrías definir qué es el punto de pedido? Este indicador es esencial para prevenir desabastecimientos en cualquier almacén, garantizando así la reposición oportuna de los productos. Pero… ¿Cómo se calcula y se interpreta su valor para asegurar la precisión en la orden de nuevas existencias?

En este post, detallaremos la función del punto de pedido y su repercusión en la gestión del inventario. Sin embargo, para entender este medidor logístico, es necesario familiarizarse con dos conceptos básicos: el tiempo de entrega (lead time) y la cantidad mínima de pedido (MOQ). Ambos factores ejercen una influencia relevante en la organización del stock del almacén.

Qué es el punto de pedido: una definición esencial

El punto de pedido, también conocido por sus siglas en inglés como ROP (Reorder Point), es un indicador crítico que señala el momento exacto en el cual una empresa o almacén de consolidación debe realizar un nuevo pedido de mercancías para evitar una situación de rotura de stock. Este nivel de inventario se determina con el objetivo de asegurar que exista la cantidad suficiente de productos disponibles para cubrir la demanda hasta la llegada del próximo envío.

Cómo calcular el punto de pedido: una guía paso a paso

Si buscas resolver las incertidumbres relacionadas con el sobreabastecimiento o las pérdidas ocasionadas por una gestión deficiente del inventario, la respuesta es la fórmula del punto de pedido. Esta ecuación integra tres componentes clave: el nivel de stock de seguridad, el lead time y el consumo esperado del producto. La expresión matemática exacta sería:

Punto de Pedido = Stock de seguridad + (Consumo esperado x Lead Time)

• Nivel de stock de seguridad: el stock de seguridad es una cantidad de inventario que se mantiene en reserva para protegerse contra imprevistos en la demanda o retrasos en la entrega. Este nivel debe ser suficiente para cubrir las necesidades del período de lead time. La determinación adecuada del stock de seguridad es crucial para evitar la rotura de stock sin incurrir en costos excesivos por sobrealmacenamiento.
• Lead time (tiempo de suministro): el lead time, o tiempo de suministro, se refiere al período que transcurre desde que se realiza un pedido hasta que se recibe la mercancía. Comprender y gestionar correctamente el lead time es esencial, ya que afecta directamente al cálculo del punto de pedido. Un lead time largo puede requerir un mayor stock de seguridad, mientras que un lead time corto podría reducir la necesidad de mantener grandes cantidades de inventario.
• Consumo esperado: el consumo esperado es la cantidad de producto que se prevé utilizar o vender en un período determinado, normalmente expresado en días. Este factor es vital para calcular cuándo será necesario reabastecer el inventario antes de que se agoten las existencias. La precisión en la estimación del consumo esperado permite ajustar mejor el punto de pedido, optimizando los niveles de stock y minimizando tanto la escasez como el exceso de inventario.

El papel del stock de seguridad en la determinación del punto de pedido

Tal y como hemos adelantado, el stock de seguridad forma parte en la determinación del punto de pedido. Este stock adicional se mantiene para cubrir variaciones inesperadas en la demanda, tiempos de entrega más largos de lo previsto o cualquier otra eventualidad que pueda afectar el suministro de productos.

Al calcular el punto de pedido, el nivel de stock de seguridad se suma al nivel de inventario proyectado durante el lead time, asegurando así que haya suficiente disponibilidad de productos para satisfacer la demanda incluso en situaciones inesperadas. Se puede llegar a decir que el stock de seguridad actúa como un colchón protector que ayuda a garantizar un servicio continuo a los clientes.

Tiempo de reaprovisionamiento y su efecto en el punto de pedido

El tiempo de reaprovisionamiento es el intervalo que transcurre desde que se emite un pedido hasta que los productos son recibidos físicamente en el almacén. Este lapso es esencial para anticipar la demanda futura y evitar la escasez de existencias. La omisión de este factor puede ocasionar la falta de disponibilidad del inventario en el momento necesario, lo cual repercute negativamente en las ventas y, consecuentemente, en la satisfacción del cliente.

Para gestionar de manera efectiva el tiempo de aprovisionamiento, se pueden implementar diversas estrategias:

• Colaborar con proveedores locales: esto puede reducir los tiempos de entrega, especialmente en productos de alta rotación.
• Integrar sistemas de información avanzados: a través de sistemas digitales de gestión de inventario y pronóstico de la demanda para prever de manera más precisa las necesidades del stock.
• Establecer relaciones sólidas con proveedores: mantener una comunicación con los proveedores puede agilizar los procesos de pedido y entrega, reduciendo el lead time.