Caso de éxito: instalación de un almacén autoportante por Esnova Racks

Esnova Racks entrega una instalación de almacén autoportante para una importante empresa en Países Bajos con un diseño un tanto especial.

Es una instalación diseñada para el almacenaje y gestión de cargas paletizadas y también no paletizadas. Su configuración viene determinada por el tipo de producto almacenado y su necesidad de gestionarse rápida y eficazmente, donde las cargas paletizadas se colocan en los extremos quedando el miniload para cargas no paletizadas en el centro del almacén a modo de sándwich.

En un almacén autoportante las estanterías son elementos estructurales que soportan la pared y el techo. Este tipo de construcción de almacenes es diferente de las estructuras estándar, en las que las estanterías se colocan en un edificio ya existente.

Características principales de este sistema de almacenaje de gran altura

• El almacén tiene 27 metros de altura, cuenta con un total de 500 metros de transportadores y sus instalaciones incluyen seis transelevadores automáticos para la gestión de las cargas paletizadas y dos transelevadores para la gestión de las cargas no paletizadas.
• Su capacidad de almacenaje llegará a los 18.000 palets y 8.000 minicargas.

El almacén forma parte de un centro de producción hipermoderno que contará no sólo con operaciones de producción, almacenamiento y oficinas, sino también con un centro de innovación. Su ubicación estratégica permite entregar y despachar las mercancías con rapidez y eficacia.

La solución total garantiza que todas las materias primas y otros artículos necesarios lleguen al lugar correcto en el momento adecuado, de forma eficiente y automática. Desde la entrada de mercancías hasta la producción, pasando por el embalaje y el almacenamiento.

¿Cuáles son las ventajas de un almacén autoportante?

El almacén autoportante es un sistema que está diseñado para soportar -además de las unidades de carga-, las acciones del viento, la nieve o los diferentes cambios climatológicos. Sus características principales son el aprovechamiento del espacio vertical y su gran capacidad de gestión, pero este sistema ofrece otras muchas ventajas:

• Máximo aprovechamiento del espacio y la altura. Gracias a su diseño exento de pilares, el aprovechamiento del espacio urbanizable es altísimo, lo que contribuye a disminuir los costes de compra. Además, dependiendo siempre de las normativas locales, este tipo de sistemas pueden superar incluso los 40 metros de altura y son una de las soluciones más utilizadas cuando los almacenes están dispuestos de manera vertical.
• Sencillez en la construcción. La obra civil de un almacén autoportante es mínima. La estructura del edificio se construye sobre una gran losa de hormigón y en ocasiones puede requerir la instalación de un muro perimetral de estanqueidad. Tras esta sencilla cimentación, ya se puede comenzar a instalar el sistema modular.
• Reducción del tiempo de ejecución. Los tiempos de instalación de este tipo de almacén disminuyen enormemente si los comparamos con otros almacenes tradicionales, y es que una vez construida la base, la estructura general y los cerramientos se pueden ir instalando de forma progresiva y simultánea. Un gran punto a favor para las empresas que cuentan con tiempos muy ajustados.
• Gran ahorro en los costes finales. Generalmente, gracias al aprovechamiento de la superficie y la reducción de los tiempos de ejecución los costes disminuyen aportando una mayor rentabilidad al futuro almacén. Este sistema tiene un coste mucho menor al de un almacén tradicional, el cual necesita estanterías metálicas.

¿Te planteas instalar una estructura autoportante? Nuestros almacenes son muy resistentes al estar fabricados en acero de máxima calidad. Si necesitas más información, no lo dudes y ponte en contacto con nosotros. En Esnova te asesoraremos sin ningún compromiso.